El residencial de 24 viviendas se localiza en la zona de Bahía Calma, zona turística del municipio de Pájara en la isla de Fuerteventura.

La propuesta consiste en el desarrollo de un complejo de apartamentos de 1 y 2 dormitorios, distribuidos en 3 plantas de altura, y organizados de tal forma que se cierran a la vía rodada de acceso al edificio y se abren en busca de las vistas al mar, sobre las zonas comunes privativas de la parcela.

El acceso de los apartamentos se realiza mediante unos pasillos exteriores cubiertos que facilitan las distribución en cada una de las plantas.

Bajo rasante se distribuye el garaje común, así como los trasteros de cada uno de los apartamentos.

Los apartamentos de última planta cuentan con acceso al solarium privativo de cubierta mediante una escalera de caracol que arranca directamente desde su terraza.

Todos los apartamentos cuentan con una amplia terraza desde dónde se disfruta de excelentes vistas sobre la costa de la isla de Fuerteventura.

La caja del ascensor, acabada en hormigón visto, dialoga con la escalera metálica en color turquesa, al igual que el resto de la cerrajería, convirtiéndose casi en un elemento escultórico dentro del conjunto.

La cuidada jardinera compuesta por vegetación endémica dota, junto con la piscina, del frescor demandado por los ocupantes en esta zona de la isla.